domingo, 16 de agosto de 2015

Reseña de Padre Rico, Padre Pobre: lo que aprendí







                  


Título: Padre Rico, Padre Pobre

Título Original: Rich Dad Poor Dad

Autor: Robert Kiyosaki

Publicación: 1997

Extraído del libro, sobre el autor:


Robert Kiyosaki ha transformado radicalmente la forma en que millones de personas alrededor del mundo perciben el concepto del dinero. Con perspectivas que contradicen el conocimiento convencional, Robert se ha ganado una gran reputación por hablar claro, ser irreverente y tener valor. Es reconocido en todo el mundo como un defensor apasionado de la educación financiera.

En mi opinión personal, este es un excelente libro. Lo había leído hace algunos años y ahora que lo vuelvo a leer, me doy cuenta de que me cambia mi modo de pensar, me da un giro de 180 grados porque me dice: sal, haz algo, toma acción sobre tu futuro: tienes que hacerlo! Es un libro que enseña que no necesariamente lo que todo el mundo hace, es lo que tú debes hacer y que, si así lo quieres, tienes en tus manos el tomar la decisión de seguir en lo que estás, o en cambiar tu vida. Tú decides! Les comparto lo más importante que aprendí con Padre Rico, Padre Pobre y espero de corazón que también les inspire a ustedes a conseguir sus sueños y generar cambios positivos en sus vidas:

1. Con la escuela no es suficiente

La idea que nos inculcan a muchos desde niños como futuro para nuestra vida es: ve a la escuela, estudia mucho, saca buenas calificaciones, luego consigue un empleo seguro, te guste este o no, cuídalo, gana tu salario, ahorra, ten un seguro y prepárate para cuando ya no puedas trabajar más, tener tu pensión. Lo que olvidan es que en la escuela a la que vamos, incluyendo estudios superiores, no nos ofrecen una educación que es sumamente importante: la educación financiera. Una frase del libro que me describe a mí es esta:

Increíblemente, esos mismos niños que se gradúan con calificaciones excelentes también pueden tener una programación y estructura deficientes en el aspecto financiero.
Yo personalmente siempre obtuve buenas calificaciones, impulsada por el gran consejo de mi madre de no ser conformista y esforzarme por ser cada vez mejor, es algo de lo que me siento orgullosa y le agradezco mucho. Sin embargo, esas buenas calificaciones no me enseñaron cómo manejar efectivamente mi dinero y hoy, llevo ya vario años haciendo grandes esfuerzos por salir de deudas, pagar mi casa y porque mi salario me alcance para mis gastos, y ni siquiera me alcanza para ahorrar. Entonces me pregunto: ¿será que me faltó aprender algo más?

2. Todo se basa en el poder de la mente
Hace unos meses tuve la suerte de leer el libro de Rohnda Byrne llamado "El Secreto" que trata sobre la ley de la atracción y el poder de la mente para conseguir lo que quieres. Me doy cuenta que tanto Robert Kiyosaki como su padre rico también creen firmemente en ese secreto. El padre rico era "un fanático del ejercicio mental y consideraba que el cerebro era el ordenador más potente del mundo". Recomienda no decir cosas como: "no puedo darme ese lujo" y en su lugar preguntarse "¿Qué tengo que hacer para darme ese lujo?". Como ven es un cambio en la forma de pensar y de ver las cosas. Para mí la primera me pone limitaciones, la segunda me obliga a ser creativa y ponerme a pensar y actuar para obtener lo que quiero.



3. Nunca dejes de aprender

Kiyosaki impulsa muchísimo el aprendizaje, principalmente la educación financiera. Aconseja leer todo lo que puedas sobre emprendedurismo, negocios, finanzas, contabilidad y sobre las personas que como él, han conseguido gran riqueza con el fin de aprender de ellos. Menciona en este libro otros libros que te pueden ayudar a seguir aprendiendo y recomienda buscar siempre nuevas fórmulas de inversión para moverte con el cambio del mundo, por medio del aprendizaje, ya sea con libros, seminarios y otros medios.

El verdadero aprendizaje exige energía, pasión y un deseo ardiente. Y el enfado es parte importante de esa fórmula porque la pasión es la combinación del enojo y el amor.

4. Adquiere activos

No se trata de adquirir activos que te generen deudas, como un carro o una casa. Se trata de adquirir activos que te generen dinero sobre tu dinero, es decir: poner tu dinero a trabajar para ti para generar más. Esto es radicalmente importante. La mayoría de nosotros simplemente ganamos el salario, una buena parte se la lleva el gobierno en impuestos y el resto siempre buscamos la manera de gastarlo. Pero lo que debemos hacer es aprender a adquirir activos para tener nuevas fuentes de ingresos fijos que nos ayuden a que esos ingresos extras sean mayores a nuestros gastos, y así conseguir independencia financiera.


Un activo pone dinero en mi bolsillo, un pasivo saca dinero de él.

5. Da para recibir, la ley de la atracción

Es muy sencillo, pero es lo más importante. Debes ser generoso, y no con la idea de dar para recibir algo a cambio, sino simplemente por lo bonito de dar a quien necesita. No esperes a que te sobre para dar, porque ¿qué mérito hay? Por el contrario, debes dar aquello que tú necesitas, ahí hay real generosidad.

Cada vez que sientas que no tienes o que te hace falta algo, primero comparte eso mismo que necesitas y se te devolverá a manos llenas.


Este libro enseña muchas más cosas buenas e interesantes, pero en resumen estas son las que más me marcaron. Espero que les haya gustado y les recomiendo mucho este libro.

Sígueme en Facebook: www.facebook.com/ElSentirEnLosLibros

Sígueme en Instagram: https://instagram.com/elsentirenloslibros/


Espero que les haya gustado, si es así, déjenme sus comentarios: ¿Leyeron Padre Rico Padre Pobre? ¿Qué aprendieron ustedes y qué opinan sobre mis comentarios?

Si no les gustó, igual pónganlo en sus comentarios para saber cómo puedo mejorar. Díganme de qué libro quieren que escriba.

Nos vemos....

2 comentarios:

  1. Hola Ismael, aaahhh muchas gracias por nominarme. Me encanta la idea y tu blog está estupendo. Sin falta esta semana respongo a tu nominación. Pura vida!

    ResponderBorrar
  2. Hola!
    La verdad es que el libro no me llama mucho la atención.
    No es mi estilo
    Un besito
    PD: No conocia tu blog. Me quedo

    ResponderBorrar